domingo, 15 de enero de 2023

Aunque a veces no lo parezca, somos libres...

Ahora que Shakira está ventilando su ruptura con Piqué a través de sus canciones, en una versión mejorada de las entrevistas en el Hola, pero con más creatividad y rédito económico que los que ofrece el papel couché, es el momento de escribir esta reflexión que, precisamente, lleva tiempo rumiando en mi cabeza. Lo curioso de esta historia Shakira vs. Piqué es que hay retractores y defensores de los dos bandos, y provoca comentarios de todo tipo en Internet y en los medios de comunicación, demostrando una vez más que el ser humano se debe aburrir mucho y que las vidas insulsas crean espectadores de las vidas ajenas, pero esa es otra reflexión que abordaré en otro momento. Volviendo a la reflexión inicial, entiendo perfectamente que Shakira se sienta dolida. En una ruptura suele haber una de las partes que no está de acuerdo, pero independientemente de esto, creo que es importante tener claro a estas alturas de la historia,-la historia de la humanidad, no de la historia Shakira vs. Piqué-, que en nuestra sociedad occidental existe algo que se llama "libertad". Todos somos libres para amar y elegir a la persona con la que queremos compartir nuestra vida, -no olvidemos que la vida es "nuestra", aunque hayamos jurado amor eterno a otra persona-, si una tercera persona aparece en una relación de pareja es porque algo faltaba en esa relación, algo no iba bien, al menos para uno de los componentes de esa pareja, y lo ha encontrado en otra parte. Tendemos a pensar que nos pertenecen los otros, como si se tratasen de objetos, y algunas personas a pesar de ser infelices, aceptan continuar en esas relaciones, siendo esclavos de su pareja, de los convencionalismos, de los hábitos, del "qué dirán", -queda la tranquilidad que será menos mediático que Shakira vs. Piqué-. Para terminar, a las personas que se sienten abandonadas... quizás podrían pensar si eran felices en esa relación, si creen que faltaba algo...podrían hacer un poco de autocrítica desde la calma y seguramente encontrarán los motivos que hicieron que el otro se sintiese atraído por otra persona. Pero principalmente, ser consciente de que somos libres para empezar y dejar relaciones.

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